Qué provoca la inflamación en el paladar
El paladar es una estructura ósea y muscular que conforma la parte superior de la boca y el suelo de la nariz. Es fundamental mantener cuidada la zona, ya que es un elemento imprescindible para los procesos de masticación, ingesta de alimentos y respiración. Sin embargo, lo cierto es que la inflamación en el paladar se produce con frecuencia y que debe tratarse para evitar que derive en una afección más grave.
A continuación, analizaremos cuáles son las principales causas que provocan su inflamación, así como la detección de síntomas con los que prevenir e iniciar su tratamiento.
Cómo detectar un paladar inflamado
Para detectar posibles síntomas es importante conocer cómo luce un paladar sano. Este tiene un aspecto rosado y presenta un color uniforme, lo que implica que uno de los primeros signos de alerta sea un cambio en su tonalidad, pasando a un tono amarillento, un rojo más vivo o incluso, un tono blanquecino.
Otro posible síntoma puede ser la aparición de llagas, sensación de boca seca, escozor en el propio y malestar generalizado en la boca. En caso de detectar alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es importante acudir a su clínica dental, ya que dicha inflamación puede ser síntoma de enfermedades que afectan a nuestra salud en general.
Cuáles son las causas que provocan inflamación de paladar
Una de las principales causas que provocan inflamación en el paladar suele ser la ingesta de alimentos demasiado calientes o comidas excesivamente picantes. No obstante, si es esta la causa, el paciente suele recuperarse con el paso del tiempo sin recurrir a ningún tipo de tratamiento.
Otra de las causas más frecuentes suele ser candidiasis bucal. Suele aparecer cuando existen alteraciones en el sistema inmunológico o en pacientes que están en un tratamiento con antibióticos. En este caso, es habitual que el paladar presente un tono blanquecino o que aparezcan manchas de color rojo.
También puede provocar la inflamación del paladar la deshidratación, heridas en la zona del paladar causadas por la ingesta de alimentos punzantes y el consumo de tabaco y alcohol.
Tratamientos para inflamación de paladar
Como hemos comentado en el anterior apartado, en la mayoría de las ocasiones la inflamación desaparece por sí sola o puede tratarse desde casa siguiendo una serie de recomendaciones. En caso de que esta persista durante más de una semana y aparezca sin motivo aparente, es importante acudir al odontólogo para poner en marcha un tratamiento.
Aunque es cierto que las ampollas y llagas suelen desaparecer al cabo de un tiempo por sí mismas, existen medicamentos que pueden utilizarse para reducir su gravedad, como los antiinflamatorios.
El consumo de líquidos fríos o el hecho de colocar un objeto frío sobre la zona inflamada ayuda a adormecer la zona y a reducir la sensación de malestar.
Cómo cuidar tu paladar
Para evitar que tu paladar se inflame, puedes seguir las siguientes recomendaciones:
En primer lugar, es importante mantener una buena alimentación con el fin de mantener las defensas altas, así como tener una buena higiene bucal. Para ello, se debe emplear un cepillo de dientes adecuado, así como cepillar correctamente la lengua y hacer uso de un enjuague bucal.
Otra medida de prevención es evitar el consumo de productos demasiado picantes y esperar unos minutos tras el emplatado para reducir la temperatura de la comida. De esta forma, se evitarán quemaduras y se reducirá el riesgo de dañar las mucosas y las membranas de nuestra boca, además de prevenir otras enfermedades como la gastritis.
Asimismo, reduciendo el consumo de alimentos crujientes o demasiado duros se puede evitar la aparición de heridas, las cuales pueden desencadenar infecciones. También es importante tener cuidado con aquellos objetos punzantes que te lleves a la boca, los cuales pueden herirte y dañarte.
Otra medida que puedes tomar para mantener tu paladar sano es eliminar el consumo de tabaco y de bebidas alcohólicas, ya que el tabaco puede provocar quemaduras en la zona blanda del paladar y el alcohol causa deshidratación. Por tanto, reducir la ingesta de alcohol y tomar mayor cantidad de agua al día, puede mejorar la hidratación en el organismo y, por tanto, reducir la probabilidad de presentar inflamación.
Por último, evitar el estrés también permite prevenir la inflamación y otras enfermedades bucales. Aunque esto resulte extraño, el estrés es uno de los principales desencadenantes de enfermedades orales, pudiendo causar problemas mandibulares, bruxismo e infecciones. Así que, no es inusual ver cómo el estrés propicia la aparición de bultos en la zona del paladar.
Es por eso que en la clínica dental YB-dent tratamos de dar un diagnóstico personalizado a cada paciente acorde a su caso y a su situación personal.
